Cambios físicos al correr: ¿Qué pasa en tu cuerpo al practicar running?

Cuando comienzas a practicar running, puedes comenzar a experimentar cambios en tu cuerpo, sin duda notarás dolores los primeros días, pero, a largo plazo, ¿cuáles son los cambios físicos al correr?

Desde beneficios MUY buenos a la salud, a algunos efectos secundarios que posiblemente notarás luego de un tiempo de practicar running, te contamos todos los cambios que puede mostrar tu cuerpo al salir a correr.

Cambios físicos al correr

Aunque no existe un tiempo específico en el que comenzarás a notar cambios físicos, sobre todo, porque cada cuerpo es diferente, estos efectos pueden aparecer al comenzar a practicar running y convertirlo en un hábito.

Recuerda que mucho va a depender de:

  • Tu edad
  • Nivel físico
  • Tipo de entrenamientos
  • Nutrición
  • Frecuencia de entrenamiento
  • Volumen
  • Intensidad

Aunque al principio puedas comenzar a notar dolores, agotamiento o calambres, es cuestión de tiempo para acostumbrarte y que comiencen otros tipos de cambios a surgir en tu cuerpo.

A continuación, te presentamos cambios físicos al correr:

1. Los beneficios y cambios positivos en el cuerpo al practicar running

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Una vez que conviertes el correr en un hábito, es posible que luego de 3 a 4 semanas o incluso luego de meses, comiences a descubrir nuevos cambios en tu cuerpo.

Eso sí, lo mejor y más recomendado es que combines esta actividad física con una buena alimentación, sobre todo si buscas bajar de peso, debes tener en cuenta el déficit calórico.

Vamos a explorar los diferentes beneficios que puedes obtener y los cambios a experimentar al correr:

  • Mayor resistencia:

Es normal que, al comenzar a correr, notes que te cuesta mucho más el terminar tus rutas y que, si te sobre esfuerzas, sientas que en cualquier momento te vas a desmayar, incluso si son solo 30 minutos al día…

Y dirás, sabiendo esto, ¿con qué motivación voy a comenzar a correr?

Pero no todo es malo, debes saber que, con el paso del tiempo y siendo constante en tus salidas de running, lograrás mejorar tu resistencia y en solo cuestión de unas semanas, serás capaz de recorrer mayores distancias.

Tus pulmones y piernas se adaptarán a un nuevo nivel de ejercicio, pudiendo correr más rápido y mayores distancias antes de sentir esa sensación de agotamiento que tenías al comienzo.

¡Tendrás mejor síntesis del oxígeno y más fuerza para seguir al hacerlo con frecuencia!

  • Metabolismo más rápido:

Una vez que tu cuerpo se vuelve más activo y estás en movimiento, tu cuerpo comienza a experimentar diferentes cambios sumamente beneficiosos a la salud:

  • Refuerzo del sistema inmunitario
  • Mejor salud del sistema cardiovascular
  • Mejoras en el sistema digestivo.

Todo esto, combinado, hará que tu metabolismo funcione más rápido y de una forma más eficiente, lo que se traduce en una producción de energía mucho más eficiente.

  • Quema de grasa:

Hacer ejercicio y mantenerte activo se transforma en quema de calorías, lo que a su vez significa la quema de grasa al utilizar parte de nuestra energía para entrenar.

Cuando corremos, nuestro cuerpo utiliza las reservas de glicógeno en los músculos, unos depósitos que están llenos de la comida que ingerimos.

Una vez que comenzamos a consumir estos depósitos y llegan a su fin -como el combustible de un coche- pasamos a quemar nuestras reservas y es allí donde entra la quema de grasa, kilos menos, mayor autoestima, bienestar físico y nos ayuda a sentirnos bien.

  • Ganar músculos:

Aunque pueda parecer que los mejores ejercicios para ganar músculos son los de fuerza como las pesas o el CrossFit, también es cierto que el correr es una excelente actividad para construir músculos más fuertes, sobre todo en la parte baja del cuerpo.

Al correr, puedes comenzar a experimentar:

  • Glúteos más firmes
  • Correr tonifica los muslos
  • Gemelos firmes y con más definición
  • Puedes adelgazar piernas corriendo
  • Ganar masa muscular
  • Salir a correr adelgaza, pero también te hace más fuerte en músculos

No olvides que, para obtener los mejores beneficios en la parte baja del cuerpo, es necesario que vayas bien equipado, esto quiere decir, con unas zapatillas de running que sean adecuadas para ti y te brinden el soporte que necesitas.

  • Mejoran tu postura:

Al correr en la forma correcta, es una excelente forma de mejorar tu postura, de hecho, comenzarás a notar que tu cuerpo se mantiene erguido ya que es imposible hacer running mientras estás encorvado.

¡Muy buen ejercicio para quienes pasan mucho tiempo sentados!

  • Huesos más fuertes:

Aunque correr pueda significar un deporte en el que tienes que soportar mayor peso en tus articulaciones, lo que podría terminar en lesiones, también es cierto que el running hace que tus huesos se fortalezcan.

Al correr de forma regular, tendrás beneficios en la salud ósea, ya que ayuda a prevenir el debilitamiento óseo que viene con la edad de manera que se puede mantener los huesos más fuertes por más tiempo.

  • Mejores niveles de colesterol:

Al ejercitarse de manera regular, no importa si es a una intensidad moderada, te puede ayudar a disminuir los niveles de colesterol malo y aumentar el bueno.

  • Menos estrés y más relajación:

Una de las mejores cosas de ejercitarte, sea practicando running u otras actividades físicas, es la relajación y los efectos positivos a la salud mental, ya que nos regenera y estabiliza, alivia el estrés y nos ayuda a sentirnos mejor.

Si sientes que tus músculos están un poco tensos después de salir a correr, puedes usar un rodillo de espuma o incluso calcetines de compresión para aumentar tu flujo sanguíneo.

Al correr, liberas endorfinas, la hormona de la felicidad, lo que te ayudará a estar en un mejor estado mental y físico.

ATENCIÓN

Los efectos positivos a la salud mental son pasajeros al liberarse las endorfinas, aunque no sustituyen ningún tratamiento profesional, pueden ayudar a sentirte más calmado y relajado.

  • Ayuda a salir de casa con más frecuencia:

Si trabajas desde casa o sales poco durante tus tiempos libres, correr de forma moderada será un momento perfecto para desconectar, ejercitarte y tener un momento solo para ti.

Te permite además conocer lo que te rodea, explorar tu ciudad y dejar a un lado la rutina en casa varios días a la semana al salir a correr.

Si quieres saber si es beneficioso correr todos los días o si te conviene más correr dos veces por semana por tu nivel de actividad física, puedes echarle un vistazo a este artículo donde te contamos todo.

2. Los efectos secundarios negativos y frecuentes al salir a correr

Aunque correr está lleno de beneficios positivos para la salud, como todo en la vida, también tiene su lado un tanto negativo y son efectos secundarios que puedes experimentar, así que mejor tenerlos en cuenta para que no te tomen por sorpresa.

Recuerda que, en el running, todo consiste en constancia, planificación y preparación, así que ten en cuenta lo siguiente por si alguna de estas cosas aparece en tu vida de runner:

  • Reducción del pecho:

Si eres mujer, debes saber que una de las “desventajas” de practicar running es que puedes reducir una talla de pecho al quemar grasa o tejido adiposo que se encuentra en esta zona.

Puede que algunas lo vean entre los beneficios del running en las mujeres, mientras que otras no, por lo que es conveniente que lo conozcas.

Eso sí, si combinas el running con otros entrenamientos como levantamiento de pesas o ejercicios de resistencia, esta área se va a fortalecer y no tendrás problema con pérdida de grasa en la zona.

  • Roce o piel irritada:

Sea en el área de los muslos o en tus pies, diferentes zonas del cuerpo pueden estar expuestas al roce por la fricción de la ropa y el contacto con la piel.

Para evitarlo, asegúrate de que todas las prendas que lleves evitan las rozaduras, como calcetines que sean aptos o pantalones cortos de running que cubran el área de los muslos si tienes este problema.

UN CONSEJO

Para evitar rozaduras, también puedes usar cremas especiales o lociones que evitan que la zona se enrojece, inflama, salgan ampollas o pústulas.

  • Ampollas:

Las ampollas pueden ser un problema frecuente para corredores, estas son causadas por rozaduras o puntos de presión por unas zapatillas que no son aptas.

De igual manera, puedes tener ampollas por recorrer distancias más largas de lo habitual, por lo que, siempre es recomendable comenzar a correr de forma gradual e ir incrementando la distancia, velocidad e intensidad poco a poco.

  • Las uñas de los pies pueden volverse negras:

Un problema muy común que, quizá, si no has practicado running nunca, no habías escuchado o leído antes.

Si eres principiante, no te preocupes, que no es algo que vaya a aparecer a la siguiente semana de empezar, este es un problema que se da a personas que ya llevan tiempo corriendo y lo hacen con mayor regularidad.

Las razones pueden ser varias, entre ellas están:

  • Zapatillas que sean demasiado estrechas y tengas un roce constante entre tus dedos/uñas y las mismas
  • Utilizas demasiada fuerza en la zona de los dedos para correr

Esto hace que los vasos sanguíneos de las uñas se abran, lo que puede derramar sangre hacia el área y hacer que esta se vea negra.

¿Qué puedes hacer al respecto?

Lamentablemente, no demasiado. Pero OJO que las uñas vuelven a crecer.

  • Los brazos pueden volverse más pequeños:

Si solo practicas running y no incorporas otros entrenamientos, como los de fuerza, podrías perder grasa en tus brazos, lo que puede ser bueno o malo si no quieres que estos se vuelvan más pequeños.

  • Nariz que moquea:

Si sueles correr en climas más fríos, debes saber que una nariz que moquea puede ser un problema frecuente.

Esto se debe a que los conductos nasales pueden irritarse, lo que provoca que aumente la cantidad de moco y tengas secreciones nasales indeseadas.

  • Necesidad de ir al baño:

Si constantemente sientes la necesidad de orinar cuando sales a correr, es posible que hayas consumido demasiado líquido, algo que puede empeorar si has bebido mucha cafeína antes de salir a practicar running.

  • Puntadas o dolores laterales:

Si algo hemos sentido todos o casi todos al salir a correr, es ese dolor punzante en uno de nuestros costados.

Y seguro te preguntas: ¿POR QUÉ A MÍ? Pero no te abrumes, que es más frecuente de lo que imaginas.

Este dolor tan insoportable se debe a un espasmo provocado por el diafragma que puede aparecer en ambos lados del abdomen.

  • Rodillas que crujen:

Al salir a correr con mayor frecuencia, es muy normal comenzar a escuchar o sentir que nuestras rodillas crujen de forma más habitual que antes.

La razón puede deberse a que, al correr de manera más frecuente, utilices más las rodillas con una mayor intensidad que antes, pero OJO que no tienes nada de qué preocuparte.

Puede ser causado por los tendones o ligamentos que se mueven sobre el hueso o por burbujas de nitrógeno en las articulaciones que estallan y hacen este sonido.

Aunque si sientes una sensación de chirrido o raspado al mover tus rodillas, lo más recomendable es ir al médico a una revisión antes de seguir con tus prácticas de running.

  • Dolores de cabeza:

Si practicas running, es probable que alguna vez experimentes dolores de cabeza ya que son un efecto secundario bastante común.

Las dos razones más comunes pueden ser los músculos tensos del cuello o una mala hidratación, por ello:

  • Asegúrate de estirar bien los músculos del cuello antes y después de correr
  • Asegúrate de estar bien hidratado cuando corres y después de salir a correr.

Ahora que conoces los cambios que puede tener tu cuerpo al correr, ¿te animas a salir de casa? Recuerda que los efectos negativos no son totalmente seguros y puede que no experimentes ninguno, así que mejor toma en cuenta los beneficios a tu salud.


Fuentes:

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